La adicción a las emociones negativas

Una adicción se define como un hábito de conductas peligrosas de las cuales no se puede prescindir o resulta muy difícil hacerlo por razones de dependencia psicológica y fisiológica. Una adicción puede ser creada por una droga, pero también por una emoción o estado de ánimo,  el cual hemos vivido durante tanto tiempo que ya nos resulta normal y cotidiano transformándose en nuestra realidad.

La adicción a las emociones negativas es algo muy común, pero difícil de identificar porque se vuelve habitual vivir con ese sentimiento, al punto que el cuerpo y células están completamente familiarizadas a estas emociones creando una necesidad/adicción a estas ondas magnéticas y péptidos.

Cuando llevamos mucho tiempo pensando en negativo o a través del miedo, la manera en como nos hablamos internamente suele ser con frases como » no soy capaz» » que pasa si no funciona» o «soy víctima de lo que el resto me hace» , creando en nuestro campo electromagnético frecuencias bajas atrayendo a nuestra vida más de lo mismo.

Eso incentivará a que nuestra mente y pensamientos continúen en esa repetición, creando péptidos de miedo, rencor y rabia y haciendo a nuestras células cada vez más adictas a estos aminoácidos y emociones.

Una persona adicta al miedo pasará su día pensando en posibles catástrofes que pueden pasar a futuro, creando de cada situación de su vida un posible desastre. Luego de vivir así su día entero, se irá a dormir en donde pasará 8 horas en completa abstinencia y despertará con la necesidad de sentir otro problema para volver a cubrir su adicción.

Lo mismo pasa con el enojo o la victimización, en donde la frecuencia es tan baja que atraerá a su vida todas las posibles opciones para enojarse o victimizarse, creando un círculo vicioso entre los pensamientos negativos, la emoción negativa y un entorno negativo.

Las células al tener memoria creen que vivir de esta manera es normal, creando una adicción tan fuerte a estos péptidos que la persona necesitará, tal cual una droga, volver siempre a esa emoción y cuando no sea así se creará una real abstinencia que puede llevar a más miedo, más enojo y más victimización.

Cuando nos encontramos constantemente bajo la sensación de miedo, enojo o stress, nuestro cerebro comienza a funcionar bajo un sistema de lucha o huida, en donde nuestro sistema nervioso autónomo le dice al cuerpo que estamos en peligro, que debemos luchar o huir creando en nuestro cuerpo cambios que pueden ser muy peligrosos si se mantienen durante un largo periodo de tiempo.

La buena noticia es que existen mecanismos para poder combatir esta situación y son tan efectivos que en pocas semanas estos sentimientos serán erradicados completamente de tu sistema, cambiando la frecuencia electromagnética que produces como ser humano, mejorando drásticamente tus pensamientos, tu cuerpo y tu vida.

Cuando los expertos entendieron que el miedo y el stress provenían desde el cerebro reptiliano o límbico, comprendieron que la manera de solucionar estos traumas era a través de la incentivación del neocortex o 3 cerebro que se relaciona con el análisis y comprensión para que éste se comunique con los otros y les de la orden de relajarse porque no hay peligro.

La herramienta más útil que he encontrado para ayudar a mis clientes es EFT (Emotional Freedom Technique), una forma de psicoterapia basada en acupuntura, PNL y medicina energética.

Esta técnica sirve para trabajar traumas, ansiedad, depresión entre muchas otras y la idea es ir tocando los 14 puntos claves del cuerpo en donde se concentra la energía para liberar el chi ( energía vital) transformando la emoción negativa en tranquilidad.

Primeramente se escribe una frase que dice  «Aunque (tu miedo, stress, trauma) me acepto total y completamente y elijo ( lo que deseas)». Esta frase la irás repitiendo mientras tocas cada punto energético.

Luego para entrelazar esta orden al hemisferio izquierdo y derecho, se tararea una canción y se cuenta hasta 5 incentivando los hemisferios, y luego se vuelve  a repetir la frase mientras vuelves a tocar los 14 puntos de acupuntura.

La finalidad de este ejercicio es liberar la energía concentrada a través de estos 14 puntos, que los hemisferios (racional y emocional) se conecten y emitan la orden de tranquilidad al cerebro reptiliano para que salga de su respuesta fisiológica de lucha huida sanando de manera efectiva y duradera el stress, trauma, miedo o carencia.

Tras algunas semanas de tratamiento se ha demostrado que más del 70% de los clientes han visto una mejora notable en sus sentimientos y manera de pensar. Este método que comenzó en los años 90 gracias a Gary Graig, ya es muy conocido y usado por muchos terapeutas y psicólogos para el manejo de emociones

Como los seres humanos estamos compuestos de energía, es muy importante cuidar nuestros pensamientos y emociones para poder atraer a nuestro cuerpo electrónico cosas positivas y experiencias llenas de amor y salud.

La manera más eficiente de trabajar la energía que auto creamos es a través de la meditación, respiraciones y visualizaciones para que tu frecuencia electromagnética vibre alto y así poder sentir, ver, pensar y ser nuestra mejor versión.

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